En ocasiones las relaciones familiares que se han mantenido a lo largo de la vida tienen una influencia notable en el momento en que uno de los progenitores muere y se procede a la apertura y lectura del testamento, y esos hijos que no han mantenido apenas contacto durante años deben enfrentarse a una voluntad testamentaria que en ocasiones no es la esperada. En este artículo veremos en que consiste la figura de la legítima, los bienes colacionables y las donaciones inoficiosas.