El futuro de las oficinas de banco pasa, desde mi opinión, por ver reducido su número y aumentado su tamaño y personal. No tenía sentido la forma de trabajo de los bancos en España, parasitando ciudades y pueblos de locales bancarios. De hecho, que los clientes exigieran una oficina cerca de casa y el trato personal era una de las principales barreras de entrada a las que se enfrentaban los bancos extranjeros, con una red de oficinas limitada.
El primer banco que basó su modelo de negocio en la venta a distancia fue ING, entidad financiera holandesa que tras el éxito de Internet y su forma de trabajo cercana a los intereses de los clientes, se está imponiendo en productos como la hipoteca naranja. Más tarde abrió alguna oficina en cada zona de influencia, acción que creo marca el futuro de los bancos actuales: pocas oficinas físicas, con personal mucho más formado y especializado en el asesoramiento en la contratación de productos complejos o de importe elevado, sean fondos de inversión o préstamos hipotecarios.